La Casa Blanca estudia otorgar un estatus legal temporal a indocumentados casados con ciudadanos estadounidenses, según reportes
El gobierno de Biden está valorando la posibilidad de otorgar un estatus legal a los cientos de miles de indocumentados casados con ciudadanos estadounidenses, según un reporte de The Wall Street Journal. La idea más popular por el momento sería emplear la herramienta del ‘parole en el lugar’.
POR:UNIVISION
La Casa Blanca estudia cómo dar un estatus migratorio legal a inmigrantes indocumentados que viven en Estados Unidos y estén casados con ciudadanos estadounidenses, según adelantó el diario The Wall Street Journal (WSJ).
Tres fuentes familiarizadas con el tema confirmaron esta información el lunes a la agencia Reuters y un reporte previo de Univision Noticias daba cuentas de las presiones que está recibiendo el presidente Joe Biden para otorgar permisos de trabajo a tres grupos de indocumentados, entre ellos los cónyuges y familiares directos de ciudadanos.
De acuerdo con el reporte de The Wall Street Journal, funcionarios del gobierno están estudiando varias propuestas para otorgar permisos de trabajo o protección de la deportación a millones de inmigrantes que llevan tiempo residiendo ilegalmente en el país, y se están centrando en las familias de estatus mixto, en las que, por lo general, uno de los padres es indocumentado, mientras el otro es ciudadano estadounidense, al igual que el o los hijos de la pareja.
La idea ha ganado popularidad en la Casa Blanca desde el verano pasado, según el WSJ, y se cree que Biden podría usarla para contrarrestar los efectos negativos de su discurso cada vez más duro en materia migratoria y de una esperada acción ejecutiva para reducir los cruces ilegales en la frontera sur.
La inmigración es uno de los temas centrales de la campaña electoral de cara a las elecciones presidenciales de noviembre, ya que muchos votantes se han mostrado preocupados por la creciente inmigración irregular a EEUU y esperan medidas más firmes para frenarla. Pero las encuestas revelan que tanto los indocumentados casados con ciudadanos estadounidenses como los dreamers despiertan simpatía entre el electorado, por lo que Biden podría echar mano de este alivio migratorio para los cónyuges de estadounidenses, a la vez que restringe drásticamente el asilo en la frontera.
Aunque un inmigrante normalmente puede calificar para obtener la residencia al casarse con un ciudadano estadounidense, a muchos indocumentados se les hace imposible por diversas razones asociadas a la normativa vigente, como por ejemplo, el haber ingresado ilegalmente al país más de una vez o haber utilizado documentación falsa, prácticas relativamente que, aunque hayan ocurrido cuando eran menores de edad, constituyen un veto para toda la vida, explicó el WSJ.
El grupo de defensa de la inmigración Fwd.us estima que hay 1.1 millones de inmigrantes indocumentados en el país casados con ciudadanos estadounidenses. Pero no todos serían elegibles, según la medida por la que opte la administración.
El año pasado, un grupo de 86 demócratas envió una carta a Biden y al secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, pidiéndoles protección para los cónyuges de ciudadanos estadounidenses y la creación de proceso de reunificación familiar para aquellos que se encuentran fuera del país.
Recientemente, otro grupo de congresistas envió otra carta al presidente Biden para pedirle que use su poder ejecutivo para conceder permisos de trabajo a cientos de miles de inmigrantes indocumentados que llevan tiempo en el país, carecen de antecedentes criminales y en muchos casos, están casados con ciudadanos estadounidenses.
Uno de los autores de la iniciativa, el representante por Illinois Jesús ‘Chuy’ García, le dijo a Univision Noticias que la razón de mayor peso para actuar del presidente, “es debido a la inacción del Congreso con el tema de la reforma migratoria”.
Qué medidas valora la Casa Blanca
De acuerdo con el reporte de WSJ, la idea que más fuerza gana es la de emplear la herramienta del ‘parole en el lugar’ (‘parole in place’), que ya se usa de forma más reducida para cónyuges y familiares directos indocumentados de veteranos o miembros en activo de las fuerzas armadas estadounidenses.
También sería similar al parole humanitario que actualmente la administración emplea para admitir a inmigrantes de varios países o a los que entran al país y son admitidos al tener una cita de asilo a través de la aplicación móvil CBP One.
Pero si bien la medida haría que estos cónyuges indocumentados se hicieran rápidamente elegibles para obtener permisos de trabajo, también crearía nuevas divisiones entre la población y en especial entre la población migrante, pues, según el WSJ, una peculiaridad en la ley de inmigración haría que solo aquellos que ingresaron al país ilegalmente —y no los que lo hicieron con una visa— sean elegibles para tarjetas de residencia.
Finalmente, el reporte del WSJ añade que, sea cual sea la medida que se tome, solo sería aplicable para los cónyuges que hayan estado casados con ciudadanos estadounidenses durante al menos cinco o 10 años. La estimación es que calificarían menos de 700,000.