Salvando a los neoyorquinos de la crisis de opioides
NYC Office of the Mayor | Ethnic & Community Media
En la ciudad de Nueva York se produce una sobredosis mortal cada 3 horas. La epidemia de opioides es una crisis de salud pública creciente a la que debemos poner fin.
Ha causado demasiado dolor en nuestra ciudad. Los fabricantes y distribuidores han enganchado a miles de neoyorquinos a los opioides y otros analgésicos. Han recaudado miles de millones de dólares, beneficiándose de la adicción y la tragedia mientras se pierden y destruyen vidas de personas.
El año pasado fue el año más mortífero registrado por muertes por sobredosis en nuestra ciudad. Solo en 2022, más de 3000 neoyorquinos murieron por sobredosis de drogas (un aumento del 12 por ciento con respecto a 2021) y las sobredosis de fentanilo representaron el 81 por ciento de esas sobredosis.
Conozco la destrucción que pueden causar las epidemias de sobredosis. Yo era oficial de policía durante la década de 1980 y vi de primera mano cómo el crack devastaba nuestras comunidades. No podemos quedarnos de brazos cruzados y permitir que lo que les pasó a las generaciones anteriores les suceda a nuestras familias. Este es el momento en el que debemos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para afrontar y derrotar la crisis de los opioides.
Gracias a los esfuerzos de la Fiscal General de Nueva York, Letitia James, quien obtuvo miles de millones de dólares de fabricantes y distribuidores de opioides, estamos invirtiendo en nuestros vecindarios en los cinco condados para combatir esta epidemia y salvar vidas.
La semana pasada, nuestra administración anunció $12 millones en nuevos fondos para Staten Island, que ha sido duramente afectada por la epidemia de sobredosis. Staten Island representa el cinco por ciento de todas las muertes por sobredosis en toda la ciudad y tiene la segunda tasa de sobredosis más alta de los cinco condados de la ciudad. Escuchamos las preocupaciones de los líderes sobre el terreno en Staten Island y estamos orgullosos de que este financiamiento crítico marque una diferencia real y garantice que más neoyorquinos puedan vivir vidas largas y saludables con sus seres queridos.
Este trabajo va de la mano de los importantes pasos que ya hemos dado para combatir la crisis de los opioides. A principios de este año, publicamos nuestra agenda de salud mental, que describe cómo ampliaremos el acceso a servicios de reducción de daños de alta calidad, y fijamos el objetivo audaz de reducir las muertes por sobredosis en un 15 por ciento para 2025.
También celebramos la primera cumbre de dos días sobre la crisis del fentanilo que reunió a líderes electos, funcionarios de salud pública y profesionales encargados de hacer cumplir la ley de todo el país a la ciudad de Nueva York para trabajar en una estrategia nacional para combatir las sobredosis de fentanilo.
Y mediante una aplicación intensiva de la ley, hemos realizado cientos de arrestos de narcotraficantes y traficantes. Además de ampliar la aplicación de la ley, hemos aumentado nuestro apoyo a la prevención, la reducción de daños, el tratamiento de trastornos por uso de sustancias y los programas de recuperación en toda la ciudad, y hemos distribuido más de 200 000 kits de naloxona y decenas de miles de tiras reactivas de fentanilo y xilazina.
Es devastador perder a un ser querido por una sobredosis. Afecta a su familia, amigos y comunidad. Impacta a esta ciudad. Cada muerte por sobredosis es una tragedia, pero cada sobredosis también se puede prevenir.
No podemos repetir los errores del pasado y, con estos fondos críticos, estamos abordando la crisis de los opioides de frente. Juntos vamos a reducir las sobredosis, salvar vidas y proteger a nuestras comunidades.
